martes, 28 de diciembre de 2010

Manual De La Nueva Gramatica

DESCRIPCIÓN:
Una obra panhispánica.
La primera vez que una gramática académica refleja todas las variedades del español.

Manual De La Nueva Gramatica De La Lengua Española

La Nueva gramática, publicada por Espasa, está a la venta desde el pasado viernes 4 de diciembre.
Es la primera gramática académica desde 1931 y ofrece el resultado de once años de trabajo de las veintidós.

Academias de la Lengua Española, que aquí fijan la norma lingüística para todos los hispanohablantes.


Esta acción conjunta de las Academias significa la articulación de un consenso que fija la norma común para todos los hispanohablantes, armonizando la unidad del idioma con la fecunda diversidad en que se realiza.

Ignacio Bosque, académico de la Española, ha sido el ponente de una obra que implica una enorme labor de
documentación e investigación. Una Comisión Interacadémica, formada por representantes de todas las áreas lingüísticas, ha coordinado los trabajos.

• Titulo completo: Manual Nueva gramatica de la lengua española
• Autor:
• Edicion N° o Año: 2010
• Idioma: Español
• Formato: PDF
• Tamaño: 8,647 Mb.
• Comprimido con: WinRar
• Password: Sin Password
• Número de Páginas: 1049

IMAGEN O PORTADA DEL LIBRO:



TABLA DE CONTENIDOS DEL LIBRO

Objetivos
- Describir las construcciones gramaticales propias del español general, así como reflejar adecuadamente las variantes fónicas, morfológicas y sintácticas.
- Ofrecer recomendaciones de carácter normativo.
- Ser obra de referencia para el conocimiento y la enseñanza del español.

Novedades

- ESPECIAL ATENCIÓN A LOS USOS AMERICANOS.
Por primera vez en una gramática académica se otorga una destacada atención a los usos del español en las distintas áreas lingüísticas. Las fuentes para describir la variación geográfica son dobles: por un lado, los textos actuales; por otro, la conciencia lingüística de los hablantes americanos.
- AMPLIA Y VARIADA BASE DOCUMENTAL.
La construcción de la Nueva gramática se apoya en un amplio repertorio de textos de muy diversa índole (literarios, ensayísticos, científicos, periodísticos y orales).
La nómina de textos citados es una de las más extensas de cuantas se hayan usado en un estudio lingüístico sobre el español. Se compone de alrededor de 3700 referencias bibliográficas, que comprenden más de 2000 autores y 300 medios de comunicación, procedentes de todas las épocas y áreas del mundo hispánico.

Contenido

La obra se articula en tres partes fundamentales:

1. Cuestiones generales, donde se describen las partes de la Gramática, las relaciones entre ellas y las unidades fundamentales del análisis gramatical.
2. Morfología, que analiza la estructura interna de las palabras.
3. Sintaxis, que analiza las estructuras que se crean en función de la forma en que se ordenan y combinan las palabras.

Versiones de la gramática

La construcción de la Nueva gramática se apoya en un amplio repertorio de textos de muy diversa índole (literarios, ensayísticos, científicos, periodísticos y orales).
La nómina de textos citados es una de las más extensas de cuantas se hayan usado en un estudio lingüístico sobre el español.

Para adecuarse a las distintas necesidades de sus destinatarios, se presenta en tres versiones:

- Nueva gramática de la lengua española. Recoge el texto completo y detallado.
Puede usarse como obra de consulta general y como texto de estudio en el nivel universitario.
- Manual. Un volumen de 750 páginas, conciso y didáctico, dirigido especialmente a los profesores y estudiantes de español en los niveles no universitarios y a todos los hispanohablantes de nivel culto medio. Se presentará en el V Congreso de la Lengua Española.
- Gramática básica. Un volumen de 250 páginas, pensado para el gran público y fácilmente adaptable al ámbito escolar, que presenta, muy simplificados, los conceptos fundamentales.

El objetivo de las Academias es conseguir que la Nueva gramática, en sus diferentes versiones, llegue a todos los hispanohablantes: a los usuarios y a los especialistas e investigadores; a los que tienen el español como primera o segunda lengua, y a los profesores de español en los diversos niveles académicos.

Manual De La Nueva Gramatica

DESCRIPCIÓN:
Una obra panhispánica.
La primera vez que una gramática académica refleja todas las variedades del español.

Manual De La Nueva Gramatica De La Lengua Española

La Nueva gramática, publicada por Espasa, está a la venta desde el pasado viernes 4 de diciembre.
Es la primera gramática académica desde 1931 y ofrece el resultado de once años de trabajo de las veintidós.

Academias de la Lengua Española, que aquí fijan la norma lingüística para todos los hispanohablantes.


Esta acción conjunta de las Academias significa la articulación de un consenso que fija la norma común para todos los hispanohablantes, armonizando la unidad del idioma con la fecunda diversidad en que se realiza.

Ignacio Bosque, académico de la Española, ha sido el ponente de una obra que implica una enorme labor de
documentación e investigación. Una Comisión Interacadémica, formada por representantes de todas las áreas lingüísticas, ha coordinado los trabajos.

• Titulo completo: Manual Nueva gramatica de la lengua española
• Autor:
• Edicion N° o Año: 2010
• Idioma: Español
• Formato: PDF
• Tamaño: 8,647 Mb.
• Comprimido con: WinRar
• Password: Sin Password
• Número de Páginas: 1049

IMAGEN O PORTADA DEL LIBRO:




TABLA DE CONTENIDOS DEL LIBRO

Objetivos
- Describir las construcciones gramaticales propias del español general, así como reflejar adecuadamente las variantes fónicas, morfológicas y sintácticas.
- Ofrecer recomendaciones de carácter normativo.
- Ser obra de referencia para el conocimiento y la enseñanza del español.

Novedades

- ESPECIAL ATENCIÓN A LOS USOS AMERICANOS.
Por primera vez en una gramática académica se otorga una destacada atención a los usos del español en las distintas áreas lingüísticas. Las fuentes para describir la variación geográfica son dobles: por un lado, los textos actuales; por otro, la conciencia lingüística de los hablantes americanos.
 
- AMPLIA Y VARIADA BASE DOCUMENTAL.
La construcción de la Nueva gramática se apoya en un amplio repertorio de textos de muy diversa índole (literarios, ensayísticos, científicos, periodísticos y orales).
La nómina de textos citados es una de las más extensas de cuantas se hayan usado en un estudio lingüístico sobre el español. Se compone de alrededor de 3700 referencias bibliográficas, que comprenden más de 2000 autores y 300 medios de comunicación, procedentes de todas las épocas y áreas del mundo hispánico.

Contenido

La obra se articula en tres partes fundamentales:

1. Cuestiones generales, donde se describen las partes de la Gramática, las relaciones entre ellas y las unidades fundamentales del análisis gramatical.
2. Morfología, que analiza la estructura interna de las palabras.
3. Sintaxis, que analiza las estructuras que se crean en función de la forma en que se ordenan y combinan las palabras.

Versiones de la gramática

La construcción de la Nueva gramática se apoya en un amplio repertorio de textos de muy diversa índole (literarios, ensayísticos, científicos, periodísticos y orales).
La nómina de textos citados es una de las más extensas de cuantas se hayan usado en un estudio lingüístico sobre el español.

Para adecuarse a las distintas necesidades de sus destinatarios, se presenta en tres versiones:

- Nueva gramática de la lengua española. Recoge el texto completo y detallado.
Puede usarse como obra de consulta general y como texto de estudio en el nivel universitario.
 
- Manual. Un volumen de 750 páginas, conciso y didáctico, dirigido especialmente a los profesores y estudiantes de español en los niveles no universitarios y a todos los hispanohablantes de nivel culto medio. Se presentará en el V Congreso de la Lengua Española.
 
- Gramática básica. Un volumen de 250 páginas, pensado para el gran público y fácilmente adaptable al ámbito escolar, que presenta, muy simplificados, los conceptos fundamentales.

El objetivo de las Academias es conseguir que la Nueva gramática, en sus diferentes versiones, llegue a todos los hispanohablantes: a los usuarios y a los especialistas e investigadores; a los que tienen el español como primera o segunda lengua, y a los profesores de español en los diversos niveles académicos.

domingo, 19 de diciembre de 2010

Caso Morlett, el vía crucis de la justicia mexicana

Nota de: Claudia Ramos
Animal Politico

Post relacionado: Requerimos de su apoyo

La familia Morlett Espinosa n
o festejará este año la Navidad. Javier, Adriana y su hijo Javier acordaron permanecer en la Ciudad de México, alquilar unas películas y cenar como cualquier otro día. El objetivo es estar ocupados y tratar de no pensar.


Porque ésta será la primera vez en 21 años que estará ausente Adriana Eugenia, la primogénita. Estudiante de tercer semestre de Arquitectura en la Universidad Nacional Autónoma de México, con promedio de 9.7. Adriana fue privada de su libertad el pasado 6 de septiembre al salir de la Biblioteca Central de la UNAM.
Desde entonces, toda la familia Morlett, cuyas raíces se encuentran en el puerto de Acapulco, Guerrero, no ha encontrado paz ni justicia. A partir de ese lunes, sus padres han tenido que sortear la insensibilidad de diversas autoridades universitarias y judiciales, cuya ineficiencia han contrarrestado con sus propios recursos, contactos e incluso servicios de inteligencia, para poder dar con el paradero de su hija.

Esta historia no es sólo de la familia Morlett. También la han vivido miles de personas en este país, cada vez con mayor frecuencia en los últimos 10 años, y cuya máxima exponente por el caso de su hijo secuestrado, Isabel Miranda de Wallace, recibió el pasado miércoles 15 de diciembre el Premio Nacional de Derechos Humanos 2010.

Como doña Isabel, Javier Morlett ha tenido que hacer su propia investigación. Y ha hecho de todo: desde contar con la asesoría de expertos en criminalística hasta acudir con brujos. A eso lo ha orillado la desesperación.

Porque qué puede hacer un padre, se lamenta don Javier, cuando la autoridad responsable de investigar la desaparición sólo atina a decir: “No tenemos nada. Lo único que queda es esperar a que algo suceda”.


Hija de familia

Adriana Eugenia Morlett Espinosa es hija de una familia muy unida. Una joven amiguera, sin novio, dedicada a sus estudios. Hasta el día de su desaparición, compartía con su hermano Javier un departamento en la colonia Copilco, a unos 30 pasos de Ciudad Universitaria.

Llegó a estudiar a la Ciudad de México en agosto de 2009. Su perfil en Facebook la describe como fan del rock, aunque también de la música clásica. Sus películas favoritas son la trilogía de El Padrino, La Princesita y The Cove. Sus series favoritas: Desperates Housewives y The Big Bang Theory. Le gusta esquiar, ir al gimnasio y bailar. Está contra el maltrato a los animales. En esta red social tiene 919 amigos.

Ese lunes 6 de septiembre acudió a las 19:00 horas a la Biblioteca Central de la UNAM. Pidió en préstamo el libro Arquitectura, teoría y diseño de contexto, de Enrique Yáñez, con el número de folio 819419.

Tenía previsto regresar inmediatamente a su departamento, donde había quedado de verse a las 20:30 horas con unos amigos para ver unas películas. En ese intervalo, recibió tres llamadas a su celular de Mauro Alberto Rodríguez Romero, estudiante de quinto semestre de Psicología, también en la UNAM.

De acuerdo al testimonio de Mauro Alberto, ambos se vieron afuera de la biblioteca a las 19:30 horas. Caminaron por “las islas” (la explanada frente a la biblioteca), pasaron frente al departamento de Adriana, se subieron al metro Copilco, se bajaron en Universidad y tomaron una combi rumbo al departamento de él, ubicado en la colonia Santo Domingo. Ahí, Mauro Alberto le mostró un sofá que presuntamente Adriana quería comprar para su departamento, cosa que duró aproximadamente dos minutos. Salieron del departamento y en la esquina de avenida Aztecas y Nezahualpilli, Adriana abordó un taxi y se fue, a las 20:30 horas. Eso es lo último que se sabe de ella.

Mauro Alberto declaró posteriormente a la Fiscalía Antisecuestros (FAS) que -contrario a su costumbre y al código de seguridad que sigue cualquier estudiante, como él mismo admitió- no se fijó qué tipo de auto era el taxi, que no tomó el número de placas ni se fijó en el chofer.

“Se fue con el novio”

Acostumbrada a estar en contacto permanente con su hija, la mamá de Adriana recibió un último mensaje de ella a las 18:30 horas, antes de salir de la Terminal de Autobuses del Sur en la corrida a Chilpancingo, después de haber estado el fin de semana con sus hijos. Al llegar a su destino, a las 22:30 horas, Javier le informó que Adriana no había regresado a la casa.

La familia de Adriana llamó reiteradamente a su celular y a su Nextel, que daban tono pero no contestaban. Los padres decidieron viajar a la ciudad de México, a donde llegaron el martes 7 de septiembre a las 2 de la mañana. A partir de ese momento, inició su vía crucis.

Asesorados por el director general de Asuntos Jurídicos de la UNAM, Alejandro Fernández, a quien acudieron por haber sido la biblioteca el último lugar donde ubicaban a Adriana, los Morlett se presentaron en el Centro de Apoyo de Personas Extraviadas y Ausentes (CAPEA) y posteriormente en la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal, en sus oficinas de la Fiscalía Desconcentrada de Coyoacán. Los Morlett fueron acompañados por un abogado asignado por la universidad, Alfredo Estévez.

En ambas dependencias se negaban a recibir la denuncia de los Morlett hasta que no pasaran las 72 horas reglamentarias para considerar a una persona desaparecida.

Además, no había “seguridad” de que se tratara de un secuestro, porque “nadie había solicitado un rescate”. Ante la insistencia del papá, que nunca aceptó el argumento de que su hija “se había ido con el novio” y que pronto regresaría, como “todo mundo”, finalmente consintieron en iniciar el papeleo del trámite. Pero nada más.

Ante la inacción de las autoridades judiciales, los Morlett recurrieron al abogado general de la UNAM, Luis Raúl González Pérez, conocido de la familia, quien les consiguió una cita con el procurador general de Justicia del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, cinco días después de la desaparición de Adriana. Los recibió una asistente, a quien los padres sólo identifican como la señorita Ángeles y cuya ayuda resultó determinante para que el caso se turnara a la FAS.

Sólo entonces los Morlett perciben cierto interés de la autoridad por hacer su trabajo, muchas horas después de las primeras 48 que los especialistas consideran cruciales para investigar un crimen.

El testigo

En lo que la autoridad tomaba nota del caso, la familia se puso a hacer su propia investigación. Conocedores de las contraseñas de su hija en las redes sociales, como medida de seguridad que habían tomado por acuerdo familiar, su prima Ana María se metió al perfil de Adriana en Facebook y ahí encontró diversos mensajes enviados por Mauro Alberto momentos antes de su desaparición.

Por medio de un contacto personal, los Morlett consiguen el registro de las llamadas recibidas en el celular de su hija y encuentran las tres que resultan ser del teléfono de Mauro Alberto.

Al ponerse en contacto con él para averiguar qué sabía de Adriana, confirman que Mauro Alberto fue la última persona en verla. De acuerdo con la versión de los Morlett, el joven da información con reticencias y preguntando reiteradamente si se había interpuesto una denuncia. Se vuelve ilocalizable los siguientes días y finalmente decide presentarse a declarar, “porque se enteró que lo andaban buscando”. Se presenta el martes siguiente a la desaparición de Adriana, con un abogado y amparado, aún cuando se le considera un testigo.

Los agentes investigadores reconstruyen el recorrido seguido por ambos jóvenes, de acuerdo con la declaración de Mauro Alberto, y llegan hasta el departamento, donde sólo verifican que Adriana no se encontraba ahí en ese momento. No realizan pruebas periciales ni de criminalística que corroboren que la joven Morlett haya estado efectivamente en ese lugar. Se le pregunta al dueño del departamento, quien vive en el mismo edificio y dice no saber nada, al tiempo que un vecino se niega a declarar sobre el tema.

Se solicitan los videos de las cámaras de seguridad del metro y de la esquina donde supuestamente Adriana tomó el taxi, con el inconveniente de que éstos ya habían sido borrados el día anterior. De acuerdo con los responsables de ambas áreas, los videos duran sólo ocho días en el archivo. Algo se habría podido hacer si los hubieran pedido a tiempo.

Ante las dudas sobre la versión que daba, Mauro Alberto se limitaba a declarar que no recordaba nada más o que no sabía la respuesta a lo que se le preguntaba. Los agentes investigadores concluyen que el testigo no tiene nada que ver con la desaparición de Adriana, “aunque su versión suene absurda”, porque no tiene antecedentes penales, no hay llamadas “sospechosas, de la delincuencia organizada” en sus registros de teléfono y “no muestra incongruencia” alguna en su declaración.

En una segunda declaración, tomada por insistencia del padre, Mauro Alberto acepta ayudar a la familia en la difusión del caso (pegando cartulinas en Ciudad Universitaria y llamando a los amigos) pero bajo ciertas condiciones de días y horarios, “porque está muy ocupado”. Ante el cuestionamiento del señor Morlett, de que no le ve disposición por ayudar a encontrar a su amiga, el joven se enoja, le indica que “ya no va a colaborar” y que “le haga como quiera”, y consigue el respaldo de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, quien emite una “advertencia” a la FAS que no lo acosen.

Como despedida, la madre de Mauro Alberto informa a los Morlett que a su hijo le están haciendo estudios psicológicos para demostrar que no puede retener recuerdos y, con ello, anular su calidad de testigo.

En forma paralela, los Morlett consiguen los videos de la Biblioteca Central, ante la insistencia del padre, quien tuvo que hablar de nueva cuenta con el abogado general de la UNAM, para que éstos fueran proporcionados, tres días después de haber sido solicitados. A las autoridades universitarias les tomó entonces unos minutos entregarlos.

En esos videos se corrobora que Adriana acudió a sacar el libro. Solicitan otros videos de las cámaras externas al edificio de la biblioteca para verificar el recorrido contado por Mauro Alberto, pero éstas no funcionan. Las que sí sirven, colocadas prácticamente en el techo de los edificios, tenían tomas abiertas, panorámicas, en las que no se distinguía nada. El caso se empantana de nuevo y las autoridades siguen tratando el caso como “una fuga”.

El libro y la llamada

Sin algo por dónde seguir, la mamá de Adriana se acuerda del libro que retiró su hija y pregunta qué había pasado con él. En la FAS le informan que ya había sido devuelto. En ese momento es el padre quien solicita a la UNAM que sea entregado a las autoridades para que lo analicen.

En compañía del abogado Alfredo Estévez, los Morlett y los agentes investigadores acuden a la Biblioteca Central, donde les entregan el libro. Se encontraban revisándolo, cuando una empleada sindicalizada de la biblioteca los “increpó” por encontrarse en las instalaciones, les quita el libro y los corre. El papá estalla en su desesperación, ante lo cual el abogado le indica que no pueden hacer nada porque se trata de “una empleada sindicalizada y no pueden meterse con el sindicato”.

La FAS tiene que elaborar dos veces un memorándum para solicitar la entrega del libro (la primera vez lo hicieron mal), el cual es entregado tras la firma y el sello correspondiente.  La autoridad no encuentra nada revelador, aunque a los padres les parece extraño el simple hecho de que un taxista, presunto secuestrador y violador, regrese un libro de su víctima a la biblioteca.

Mención aparte merece el buen trato que hasta ese momento habían recibido los Morlett del área jurídica de la UNAM. Explican que todo cambió radicalmente, pues dejaron de atenderlos y ahora ni siquiera les toman la llamada.

Por esos días apareció una nueva pista. El 18 de septiembre, un primo de Adriana cuyo número de celular se encontraba en su lista de contactos, recibe una llamada de una mujer, quien le indica que como “ella también es madre y sabe del dolor por el que pasan los Morlett, quiere avisarles que tres estudiantes de la UNAM tienen secuestrada a la joven cerca de CU para dedicarla a la prostitución”.

Los padres solicitan a la FAS que investiguen la llamada y descubren que se hizo de un teléfono público de la delegación Gustavo A. Madero. Como los agentes no localizan la caseta, no se le puede dar seguimiento. Con asesoría de un exagente de la AFI, los Morlett consiguen la ubicación del teléfono público y piden a la fiscalía que investigue las llamadas que se hicieron antes y después de que llamaran a su sobrino. Hace una semana se consiguió este listado y apenas se está analizando.

Un dolor que no acaba

Los tiempos muertos son los principales enemigos de los Morlett. Mientras están ocupados, no piensan. Por eso han solicitado asesoría de Eduardo Gallo, de Isabel Miranda de Wallace, de Alejandro Martí. Han hecho todo lo que les han sugerido y hasta han acudido con cuanto psíquico y brujo les han recomendado. Resignado, el señor Morlett externa su desesperación: “Nos han dicho que está viva, que tiene lastimado el brazo izquierdo, que piensa en nosotros… pero nadie nos puede decir en dónde está”.

Pensó en contratar espectaculares con la foto de su hija, pero los 20 mil pesos mensuales que le cobran están más allá de su presupuesto. Con su despacho de avalúos trabajando al 10% en Acapulco, el dinero escasea, aunque la familia lo apoya.

El padre de Adriana ha tenido que pasar el trago amargo de recorrer ocho servicios médicos forenses en el DF, Estado de México y Morelos, para averiguar si alguno de los cadáveres encontrados es su hija. Ha salido feliz de que no sea y angustiado porque no es. Pero su angustia se potencia cuando se topa con la negligencia e ineficacia del sistema de procuración de justicia del país.

“Gente tonta e ineficiente hay en todos lados. Pero lo que he visto hasta ahora ha sido ineficiencia, incluso negligencia, por falta de recursos y coordinación entre las distintas dependencias, ya no digamos entre los distintos estados”, cuenta Javier Morlett.

“Ya aprendí como funciona: primero ves al jefe, que es empático contigo, te atiende bien, te da café y te dice que tu hija está viva. Al segundo día te atiende el asistente y al tercer día el funcionario de tercera. Terminas atendido por un ministerio público de cuarta, ineficiente e insensible, para quien eres sólo un número y a quien no le interesa “tu caso”. Los Morlett han pasado por un desgaste emocional, físico y económico del que no saben cuándo saldrán. Dejaron casa, trabajo y vida en Guerrero para instalarse indefinidamente en la Ciudad de México. Hasta que Adriana aparezca. Mientras tanto no pierden la fe y agradecen todas las cadenas de oración.n

Caso Morlett, el vía crucis de la justicia mexicana

Nota de: Claudia Ramos
Animal Politico

Post relacionado: Requerimos de su apoyo

La familia Morlett Espinosa n
o festejará este año la Navidad. Javier, Adriana y su hijo Javier acordaron permanecer en la Ciudad de México, alquilar unas películas y cenar como cualquier otro día. El objetivo es estar ocupados y tratar de no pensar.


Porque ésta será la primera vez en 21 años que estará ausente Adriana Eugenia, la primogénita. Estudiante de tercer semestre de Arquitectura en la Universidad Nacional Autónoma de México, con promedio de 9.7. Adriana fue privada de su libertad el pasado 6 de septiembre al salir de la Biblioteca Central de la UNAM.
Desde entonces, toda la familia Morlett, cuyas raíces se encuentran en el puerto de Acapulco, Guerrero, no ha encontrado paz ni justicia. A partir de ese lunes, sus padres han tenido que sortear la insensibilidad de diversas autoridades universitarias y judiciales, cuya ineficiencia han contrarrestado con sus propios recursos, contactos e incluso servicios de inteligencia, para poder dar con el paradero de su hija.

Esta historia no es sólo de la familia Morlett. También la han vivido miles de personas en este país, cada vez con mayor frecuencia en los últimos 10 años, y cuya máxima exponente por el caso de su hijo secuestrado, Isabel Miranda de Wallace, recibió el pasado miércoles 15 de diciembre el Premio Nacional de Derechos Humanos 2010.

Como doña Isabel, Javier Morlett ha tenido que hacer su propia investigación. Y ha hecho de todo: desde contar con la asesoría de expertos en criminalística hasta acudir con brujos. A eso lo ha orillado la desesperación.

Porque qué puede hacer un padre, se lamenta don Javier, cuando la autoridad responsable de investigar la desaparición sólo atina a decir: “No tenemos nada. Lo único que queda es esperar a que algo suceda”.


Hija de familia

Adriana Eugenia Morlett Espinosa es hija de una familia muy unida. Una joven amiguera, sin novio, dedicada a sus estudios. Hasta el día de su desaparición, compartía con su hermano Javier un departamento en la colonia Copilco, a unos 30 pasos de Ciudad Universitaria.

Llegó a estudiar a la Ciudad de México en agosto de 2009. Su perfil en Facebook la describe como fan del rock, aunque también de la música clásica. Sus películas favoritas son la trilogía de El Padrino, La Princesita y The Cove. Sus series favoritas: Desperates Housewives y The Big Bang Theory. Le gusta esquiar, ir al gimnasio y bailar. Está contra el maltrato a los animales. En esta red social tiene 919 amigos.

Ese lunes 6 de septiembre acudió a las 19:00 horas a la Biblioteca Central de la UNAM. Pidió en préstamo el libro Arquitectura, teoría y diseño de contexto, de Enrique Yáñez, con el número de folio 819419.

Tenía previsto regresar inmediatamente a su departamento, donde había quedado de verse a las 20:30 horas con unos amigos para ver unas películas. En ese intervalo, recibió tres llamadas a su celular de Mauro Alberto Rodríguez Romero, estudiante de quinto semestre de Psicología, también en la UNAM.

De acuerdo al testimonio de Mauro Alberto, ambos se vieron afuera de la biblioteca a las 19:30 horas. Caminaron por “las islas” (la explanada frente a la biblioteca), pasaron frente al departamento de Adriana, se subieron al metro Copilco, se bajaron en Universidad y tomaron una combi rumbo al departamento de él, ubicado en la colonia Santo Domingo. Ahí, Mauro Alberto le mostró un sofá que presuntamente Adriana quería comprar para su departamento, cosa que duró aproximadamente dos minutos. Salieron del departamento y en la esquina de avenida Aztecas y Nezahualpilli, Adriana abordó un taxi y se fue, a las 20:30 horas. Eso es lo último que se sabe de ella.

Mauro Alberto declaró posteriormente a la Fiscalía Antisecuestros (FAS) que -contrario a su costumbre y al código de seguridad que sigue cualquier estudiante, como él mismo admitió- no se fijó qué tipo de auto era el taxi, que no tomó el número de placas ni se fijó en el chofer.

“Se fue con el novio”

Acostumbrada a estar en contacto permanente con su hija, la mamá de Adriana recibió un último mensaje de ella a las 18:30 horas, antes de salir de la Terminal de Autobuses del Sur en la corrida a Chilpancingo, después de haber estado el fin de semana con sus hijos. Al llegar a su destino, a las 22:30 horas, Javier le informó que Adriana no había regresado a la casa.

La familia de Adriana llamó reiteradamente a su celular y a su Nextel, que daban tono pero no contestaban. Los padres decidieron viajar a la ciudad de México, a donde llegaron el martes 7 de septiembre a las 2 de la mañana. A partir de ese momento, inició su vía crucis.

Asesorados por el director general de Asuntos Jurídicos de la UNAM, Alejandro Fernández, a quien acudieron por haber sido la biblioteca el último lugar donde ubicaban a Adriana, los Morlett se presentaron en el Centro de Apoyo de Personas Extraviadas y Ausentes (CAPEA) y posteriormente en la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal, en sus oficinas de la Fiscalía Desconcentrada de Coyoacán. Los Morlett fueron acompañados por un abogado asignado por la universidad, Alfredo Estévez.

En ambas dependencias se negaban a recibir la denuncia de los Morlett hasta que no pasaran las 72 horas reglamentarias para considerar a una persona desaparecida.

Además, no había “seguridad” de que se tratara de un secuestro, porque “nadie había solicitado un rescate”. Ante la insistencia del papá, que nunca aceptó el argumento de que su hija “se había ido con el novio” y que pronto regresaría, como “todo mundo”, finalmente consintieron en iniciar el papeleo del trámite. Pero nada más.

Ante la inacción de las autoridades judiciales, los Morlett recurrieron al abogado general de la UNAM, Luis Raúl González Pérez, conocido de la familia, quien les consiguió una cita con el procurador general de Justicia del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, cinco días después de la desaparición de Adriana. Los recibió una asistente, a quien los padres sólo identifican como la señorita Ángeles y cuya ayuda resultó determinante para que el caso se turnara a la FAS.

Sólo entonces los Morlett perciben cierto interés de la autoridad por hacer su trabajo, muchas horas después de las primeras 48 que los especialistas consideran cruciales para investigar un crimen.

El testigo

En lo que la autoridad tomaba nota del caso, la familia se puso a hacer su propia investigación. Conocedores de las contraseñas de su hija en las redes sociales, como medida de seguridad que habían tomado por acuerdo familiar, su prima Ana María se metió al perfil de Adriana en Facebook y ahí encontró diversos mensajes enviados por Mauro Alberto momentos antes de su desaparición.

Por medio de un contacto personal, los Morlett consiguen el registro de las llamadas recibidas en el celular de su hija y encuentran las tres que resultan ser del teléfono de Mauro Alberto.

Al ponerse en contacto con él para averiguar qué sabía de Adriana, confirman que Mauro Alberto fue la última persona en verla. De acuerdo con la versión de los Morlett, el joven da información con reticencias y preguntando reiteradamente si se había interpuesto una denuncia. Se vuelve ilocalizable los siguientes días y finalmente decide presentarse a declarar, “porque se enteró que lo andaban buscando”. Se presenta el martes siguiente a la desaparición de Adriana, con un abogado y amparado, aún cuando se le considera un testigo.

Los agentes investigadores reconstruyen el recorrido seguido por ambos jóvenes, de acuerdo con la declaración de Mauro Alberto, y llegan hasta el departamento, donde sólo verifican que Adriana no se encontraba ahí en ese momento. No realizan pruebas periciales ni de criminalística que corroboren que la joven Morlett haya estado efectivamente en ese lugar. Se le pregunta al dueño del departamento, quien vive en el mismo edificio y dice no saber nada, al tiempo que un vecino se niega a declarar sobre el tema.

Se solicitan los videos de las cámaras de seguridad del metro y de la esquina donde supuestamente Adriana tomó el taxi, con el inconveniente de que éstos ya habían sido borrados el día anterior. De acuerdo con los responsables de ambas áreas, los videos duran sólo ocho días en el archivo. Algo se habría podido hacer si los hubieran pedido a tiempo.

Ante las dudas sobre la versión que daba, Mauro Alberto se limitaba a declarar que no recordaba nada más o que no sabía la respuesta a lo que se le preguntaba. Los agentes investigadores concluyen que el testigo no tiene nada que ver con la desaparición de Adriana, “aunque su versión suene absurda”, porque no tiene antecedentes penales, no hay llamadas “sospechosas, de la delincuencia organizada” en sus registros de teléfono y “no muestra incongruencia” alguna en su declaración.

En una segunda declaración, tomada por insistencia del padre, Mauro Alberto acepta ayudar a la familia en la difusión del caso (pegando cartulinas en Ciudad Universitaria y llamando a los amigos) pero bajo ciertas condiciones de días y horarios, “porque está muy ocupado”. Ante el cuestionamiento del señor Morlett, de que no le ve disposición por ayudar a encontrar a su amiga, el joven se enoja, le indica que “ya no va a colaborar” y que “le haga como quiera”, y consigue el respaldo de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, quien emite una “advertencia” a la FAS que no lo acosen.

Como despedida, la madre de Mauro Alberto informa a los Morlett que a su hijo le están haciendo estudios psicológicos para demostrar que no puede retener recuerdos y, con ello, anular su calidad de testigo.

En forma paralela, los Morlett consiguen los videos de la Biblioteca Central, ante la insistencia del padre, quien tuvo que hablar de nueva cuenta con el abogado general de la UNAM, para que éstos fueran proporcionados, tres días después de haber sido solicitados. A las autoridades universitarias les tomó entonces unos minutos entregarlos.

En esos videos se corrobora que Adriana acudió a sacar el libro. Solicitan otros videos de las cámaras externas al edificio de la biblioteca para verificar el recorrido contado por Mauro Alberto, pero éstas no funcionan. Las que sí sirven, colocadas prácticamente en el techo de los edificios, tenían tomas abiertas, panorámicas, en las que no se distinguía nada. El caso se empantana de nuevo y las autoridades siguen tratando el caso como “una fuga”.

El libro y la llamada

Sin algo por dónde seguir, la mamá de Adriana se acuerda del libro que retiró su hija y pregunta qué había pasado con él. En la FAS le informan que ya había sido devuelto. En ese momento es el padre quien solicita a la UNAM que sea entregado a las autoridades para que lo analicen.

En compañía del abogado Alfredo Estévez, los Morlett y los agentes investigadores acuden a la Biblioteca Central, donde les entregan el libro. Se encontraban revisándolo, cuando una empleada sindicalizada de la biblioteca los “increpó” por encontrarse en las instalaciones, les quita el libro y los corre. El papá estalla en su desesperación, ante lo cual el abogado le indica que no pueden hacer nada porque se trata de “una empleada sindicalizada y no pueden meterse con el sindicato”.

La FAS tiene que elaborar dos veces un memorándum para solicitar la entrega del libro (la primera vez lo hicieron mal), el cual es entregado tras la firma y el sello correspondiente.  La autoridad no encuentra nada revelador, aunque a los padres les parece extraño el simple hecho de que un taxista, presunto secuestrador y violador, regrese un libro de su víctima a la biblioteca.

Mención aparte merece el buen trato que hasta ese momento habían recibido los Morlett del área jurídica de la UNAM. Explican que todo cambió radicalmente, pues dejaron de atenderlos y ahora ni siquiera les toman la llamada.

Por esos días apareció una nueva pista. El 18 de septiembre, un primo de Adriana cuyo número de celular se encontraba en su lista de contactos, recibe una llamada de una mujer, quien le indica que como “ella también es madre y sabe del dolor por el que pasan los Morlett, quiere avisarles que tres estudiantes de la UNAM tienen secuestrada a la joven cerca de CU para dedicarla a la prostitución”.

Los padres solicitan a la FAS que investiguen la llamada y descubren que se hizo de un teléfono público de la delegación Gustavo A. Madero. Como los agentes no localizan la caseta, no se le puede dar seguimiento. Con asesoría de un exagente de la AFI, los Morlett consiguen la ubicación del teléfono público y piden a la fiscalía que investigue las llamadas que se hicieron antes y después de que llamaran a su sobrino. Hace una semana se consiguió este listado y apenas se está analizando.

Un dolor que no acaba

Los tiempos muertos son los principales enemigos de los Morlett. Mientras están ocupados, no piensan. Por eso han solicitado asesoría de Eduardo Gallo, de Isabel Miranda de Wallace, de Alejandro Martí. Han hecho todo lo que les han sugerido y hasta han acudido con cuanto psíquico y brujo les han recomendado. Resignado, el señor Morlett externa su desesperación: “Nos han dicho que está viva, que tiene lastimado el brazo izquierdo, que piensa en nosotros… pero nadie nos puede decir en dónde está”.

Pensó en contratar espectaculares con la foto de su hija, pero los 20 mil pesos mensuales que le cobran están más allá de su presupuesto. Con su despacho de avalúos trabajando al 10% en Acapulco, el dinero escasea, aunque la familia lo apoya.

El padre de Adriana ha tenido que pasar el trago amargo de recorrer ocho servicios médicos forenses en el DF, Estado de México y Morelos, para averiguar si alguno de los cadáveres encontrados es su hija. Ha salido feliz de que no sea y angustiado porque no es. Pero su angustia se potencia cuando se topa con la negligencia e ineficacia del sistema de procuración de justicia del país.

“Gente tonta e ineficiente hay en todos lados. Pero lo que he visto hasta ahora ha sido ineficiencia, incluso negligencia, por falta de recursos y coordinación entre las distintas dependencias, ya no digamos entre los distintos estados”, cuenta Javier Morlett.

“Ya aprendí como funciona: primero ves al jefe, que es empático contigo, te atiende bien, te da café y te dice que tu hija está viva. Al segundo día te atiende el asistente y al tercer día el funcionario de tercera. Terminas atendido por un ministerio público de cuarta, ineficiente e insensible, para quien eres sólo un número y a quien no le interesa “tu caso”. Los Morlett han pasado por un desgaste emocional, físico y económico del que no saben cuándo saldrán. Dejaron casa, trabajo y vida en Guerrero para instalarse indefinidamente en la Ciudad de México. Hasta que Adriana aparezca. Mientras tanto no pierden la fe y agradecen todas las cadenas de oración.n

sábado, 18 de diciembre de 2010

Carta de navidad…?

Con todo respeto para todos lo amantes de estas fechas…

A mi en lo particular me purgan…

Todo mundo dice: Te Deseo Muchas Felicidades, Que Dios te Bendiga, Que Tengas Mucho Amor y cursilerías por el estilo.

Si de desearles algo para este próximo 2011 se trata, esta es mi lista:


1. Que este próximo año, tengan sexo en cantidades descomunales, que sea divertido, que sus parejas les cumplan todas sus fantasías, y sobre todo, que sea seguro… No queremos mas pinches escuincles en este mundo…  (a si, también por aquello de las enfermedades).

2. Que trabajen poco y que ganen el triple de dinero.

3. Que aquella persona que siempre les ha gustado, y que nunca les ha pelado, les invite a salir o les acepte una invitación y convierta todas sus fantasías en realidad sin ningún compromiso de por medio.

4. Que tengan la oportunidad de ver a todos aquellos que les han causado daño, revolcarse en su miseria.

5. Que tengan el valor de superar sus propios miedos, y logren realizar todas aquellas proezas o estupideces, que por temor al que dirán, no se han dado la oportunidad de hacer.

Pero sobre todo, les deseo lo mismo que el año pasado y eso si, de todo corazón:



Les deseo de todo corazón es que este año logren sobrevivir.

Carta de navidad…?

Con todo respeto para todos lo amantes de estas fechas…

A mi en lo particular me purgan…

Todo mundo dice: Te Deseo Muchas Felicidades, Que Dios te Bendiga, Que Tengas Mucho Amor y cursilerías por el estilo.

Si de desearles algo para este próximo 2011 se trata, esta es mi lista:


1. Que este próximo año, tengan sexo en cantidades descomunales, que sea divertido, que sus parejas les cumplan todas sus fantasías, y sobre todo, que sea seguro… No queremos mas pinches escuincles en este mundo…  (a si, también por aquello de las enfermedades).

2. Que trabajen poco y que ganen el triple de dinero.

3. Que aquella persona que siempre les ha gustado, y que nunca les ha pelado, les invite a salir o les acepte una invitación y convierta todas sus fantasías en realidad sin ningún compromiso de por medio.

4. Que tengan la oportunidad de ver a todos aquellos que les han causado daño, revolcarse en su miseria.

5. Que tengan el valor de superar sus propios miedos, y logren realizar todas aquellas proezas o estupideces, que por temor al que dirán, no se han dado la oportunidad de hacer.

Pero sobre todo, les deseo lo mismo que el año pasado y eso si, de todo corazón:



Les deseo de todo corazón es que este año logren sobrevivir.

domingo, 12 de diciembre de 2010

Mjolnir

Será en otro momento cuando les hable de la historia de este maravilloso símbolo.

Lo que ahora me mueve es que como muchos saben, y si han visitado el blog de La Gruta del Mago, se abran dado cuenta de que soy seguidor del género Vikig Metal.

El punto es que el Mjolnir, es el símbolo que se ha utilizado para representa a dicho genero.

 
Como era de esperarse, busque en diferentes lugares un “dije” que tuviera esas características, pero fue inútil, pasaron caso 2 años y no lo encontré en ningún lado.

Pero hay ocasiones en que la espera genera sus frutos.

Una amiga que fue de vacaciones a Polonia, encontró un lugar donde vendían diferentes representaciones del Mjolnir, y sin dudarlo, le pedí que me trajera algunas piezas, para tener las propias, y hacerlas llegar a alguien que compartiera el gusto por el género, o bien, solamente le agradara el “dije”.

 
Ya se vendieron algunas, por eso son pocas, pero por eso son menos atractivas…

Y aquí les traigo el pequeño muestrario:

Mjolnir - Terminado Bronce

Pequeño, discreto, el terminado da la impresión de viejo
$ 60.00 (6 piezas)

 
Mjolnir - Con Casco
Grande, pesado, la parte superior del enfrente simula un casco al igual que en la parte posterior
$ 120.00 (1 pieza)

 
Stylet - Espada Vikinga

Larga, terminado tipo bronce
$ 50.00 (4 piezas)

 
Mjolnir - Platinado

Chico, discreto, el terminado es brillante y elegante
$ 120.00 (1 pieza)

 
Mjolnir - Plano

Grande, tiene una ligera curvatura que le da relieve y elegancia
$ 150.00 (1 pieza)
 
Mjolnir - Flor

Grande, pesado, la parte superior, simula una flor
$ 120.00 (1 pieza)

Si a alguien le interesa, pueden mandar un correo a:

saurom.el.mago@gmail.com

- Si les interesan varias piezas, podríamos acordar el costo.
- Si la entrega es en el D.F. podríamos acordar un punto de entrega en el centro.
- Si la entrega es fuera del D.F. el comprador pagara la entrega vía mensajería.

Ahora si me sentí como en Mercado Libre…

Mjolnir

Será en otro momento cuando les hable de la historia de este maravilloso símbolo.

Lo que ahora me mueve es que como muchos saben, y si han visitado el blog de La Gruta del Mago, se abran dado cuenta de que soy seguidor del género Vikig Metal.

El punto es que el Mjolnir, es el símbolo que se ha utilizado para representa a dicho genero.

 
Como era de esperarse, busque en diferentes lugares un “dije” que tuviera esas características, pero fue inútil, pasaron caso 2 años y no lo encontré en ningún lado.

Pero hay ocasiones en que la espera genera sus frutos.

Una amiga que fue de vacaciones a Polonia, encontró un lugar donde vendían diferentes representaciones del Mjolnir, y sin dudarlo, le pedí que me trajera algunas piezas, para tener las propias, y hacerlas llegar a alguien que compartiera el gusto por el género, o bien, solamente le agradara el “dije”.

 
Ya se vendieron algunas, por eso son pocas, pero por eso son menos atractivas…

Y aquí les traigo el pequeño muestrario:

Mjolnir - Terminado Bronce

Pequeño, discreto, el terminado da la impresión de viejo
$ 60.00 (6 piezas)

 
Mjolnir - Con Casco
Grande, pesado, la parte superior del enfrente simula un casco al igual que en la parte posterior
$ 120.00 (1 pieza)

 
Stylet - Espada Vikinga

Larga, terminado tipo bronce
$ 50.00 (4 piezas)

 
Mjolnir - Platinado

Chico, discreto, el terminado es brillante y elegante
$ 120.00 (1 pieza)

 
Mjolnir - Plano

Grande, tiene una ligera curvatura que le da relieve y elegancia
$ 150.00 (1 pieza)
 
Mjolnir - Flor

Grande, pesado, la parte superior, simula una flor
$ 120.00 (1 pieza)

Si a alguien le interesa, pueden mandar un correo a:

saurom.el.mago@gmail.com

- Si les interesan varias piezas, podríamos acordar el costo.
- Si la entrega es en el D.F. podríamos acordar un punto de entrega en el centro.
- Si la entrega es fuera del D.F. el comprador pagara la entrega vía mensajería.

Ahora si me sentí como en Mercado Libre…

viernes, 10 de diciembre de 2010

Lenguaje florido

Post dedicado a Mariana Lorena (Mi amiga de Argentina).

Es curioso como usamos el lenguaje, y muchas veces, no nos damos cuenta de las palabras que usamos…

Palabras como Chatear, Fotoshopear o Bloggear, entre muchas otras, se han integrado al lenguaje común que utilizamos los usuarios de computadores e internet.

Pero no es lo único…

En la Ciudad de México, existen diferentes zonas culturales, que tienen sus propios localismos, por lo que hay ocasiones en que aunque formemos parte de la misma ciudad, descubrimos que usamos un lenguaje similar, pero que requiere de una contextualización particular para poder entender el mensaje.

Si a esto le sumamos, los localismos de cada estado de la republica, fácilmente nos podremos dar cuenta que existe una infinidad de palabras que estructuran y evolucionan de manera activa nuestra cultura y vida común.

Esto, bajo circunstancias normales, no tendría ninguna relevancia, pero hace algunos días platicando con una maravillosa amiga argentina, descubrimos que aunque en esencia utilizamos el mismo idioma, no manejamos el mismo lenguaje; la forma de expresar un concepto, requiere de una interpretación muy particular.

Quedo claro en esa charla, que el CALO mexicano es muy florido, lo que quiere decir, que utilizamos muchas groserías (desafortunadamente es una constante en cualquier parte del país).

Existe la costumbre que a los niños pequeños que comienzan a hablar, se les estimula a decir malas palabras (porque se escuchan tiernos)…

Pero conforme el niño va creciendo… se le censura, pues lo que en algún momento “sonó bonito”, después se convierte en una falta de respeto…

Esta estúpida costumbre, lo único que ha generado, es que desde muy niños, aprendamos a utilizas un doble sentido para groserías, pero con palabras mas suaves.

Por ejemplo (y sin intención de ofender)

1. Decimos (en doble sentido):
¡Ha… como chilla la niña!

2 .Queremos decir (con groserías):
¡Ha… como chingas!

3. Quiere decir:
Ha… como molestas…

Si en el trabajo o escuela, le decimos a un compañero la frase 1, lo mas probable es que se ría y comprenda el mensaje…

Pero si usamos la frase 2, lo más probable es que se moleste y genere un conflicto entre los interlocutores…

De acuerdo, lo optimo seria usar la frase número 3, pero casi nadie acepta un mensaje directo y preferimos disfrazas la intención y sacar una risa con nuestros cometarios…

Si bien la intención de este post es la de exponer lo “florido” de nuestro lenguaje, no pretendo hacer un catalogo de groserías; pero si les dejare a su disposición, una especie de diccionario o prontuario del uso del lenguaje utilizado por los jóvenes…

Tengo que aclarar que es una recopilación que data del año de 1994, que si bien ya tiene 16 años de antigüedad, todas las palabras siguen en uso.

Hoy en día abría que agregar otras tantas que están de moda.

No confundir el doble sentido del CALO, con el doble sentido del ALBUR, del cual quizá algún día hablaremos.

Nota: Este es un documento único en la red, pues solamente se imprimieron 1000 ejemplares y nadie más lo ha subido para difundirlo.

Pass. laorden



Lenguaje florido

Post dedicado a Mariana Lorena (Mi amiga de Argentina).

Es curioso como usamos el lenguaje, y muchas veces, no nos damos cuenta de las palabras que usamos…

Palabras como Chatear, Fotoshopear o Bloggear, entre muchas otras, se han integrado al lenguaje común que utilizamos los usuarios de computadores e internet.

Pero no es lo único…

En la Ciudad de México, existen diferentes zonas culturales, que tienen sus propios localismos, por lo que hay ocasiones en que aunque formemos parte de la misma ciudad, descubrimos que usamos un lenguaje similar, pero que requiere de una contextualización particular para poder entender el mensaje.

Si a esto le sumamos, los localismos de cada estado de la republica, fácilmente nos podremos dar cuenta que existe una infinidad de palabras que estructuran y evolucionan de manera activa nuestra cultura y vida común.

Esto, bajo circunstancias normales, no tendría ninguna relevancia, pero hace algunos días platicando con una maravillosa amiga argentina, descubrimos que aunque en esencia utilizamos el mismo idioma, no manejamos el mismo lenguaje; la forma de expresar un concepto, requiere de una interpretación muy particular.

Quedo claro en esa charla, que el CALO mexicano es muy florido, lo que quiere decir, que utilizamos muchas groserías (desafortunadamente es una constante en cualquier parte del país).

Existe la costumbre que a los niños pequeños que comienzan a hablar, se les estimula a decir malas palabras (porque se escuchan tiernos)…

Pero conforme el niño va creciendo… se le censura, pues lo que en algún momento “sonó bonito”, después se convierte en una falta de respeto…

Esta estúpida costumbre, lo único que ha generado, es que desde muy niños, aprendamos a utilizas un doble sentido para groserías, pero con palabras mas suaves.

Por ejemplo (y sin intención de ofender)

1. Decimos (en doble sentido):
¡Ha… como chilla la niña!

2 .Queremos decir (con groserías):
¡Ha… como chingas!

3. Quiere decir:
Ha… como molestas…

Si en el trabajo o escuela, le decimos a un compañero la frase 1, lo mas probable es que se ría y comprenda el mensaje…

Pero si usamos la frase 2, lo más probable es que se moleste y genere un conflicto entre los interlocutores…

De acuerdo, lo optimo seria usar la frase número 3, pero casi nadie acepta un mensaje directo y preferimos disfrazas la intención y sacar una risa con nuestros cometarios…

Si bien la intención de este post es la de exponer lo “florido” de nuestro lenguaje, no pretendo hacer un catalogo de groserías; pero si les dejare a su disposición, una especie de diccionario o prontuario del uso del lenguaje utilizado por los jóvenes…

Tengo que aclarar que es una recopilación que data del año de 1994, que si bien ya tiene 16 años de antigüedad, todas las palabras siguen en uso.

Hoy en día abría que agregar otras tantas que están de moda.

No confundir el doble sentido del CALO, con el doble sentido del ALBUR, del cual quizá algún día hablaremos.

Nota: Este es un documento único en la red, pues solamente se imprimieron 1000 ejemplares y nadie más lo ha subido para difundirlo.

Pass. laorden



lunes, 6 de diciembre de 2010

La Ley en México

Como es de muchos conocido, hace algunos días detuvieron a un niño de 14 años, que desde los 12, fungía como “sicario” de algunos miembros del narco.

A cualquiera nos impacta el tipo de suceso y atrocidades que cometió, y el que sus hermanas, una de 19 y otra de 12, participasen activamente de los mismos y de otros delitos más.



No narrare el tipo de crímenes, ni la forma, ni mucho menos la saña con la que realizo su “trabajo”, por el cual cobraba entre $2,000 y $3,000 Us.

Lo que verdaderamente hiere, es la forma en que nuestras estúpidas leyes resolverán el problema.

Resulta que al haber sido detenido en el Estado de Morelos, queda establecido por ley, que ningún menor de 16 años, podrá estar en “detención”, “correccional” o “cárcel”, como le quieran llamar, un periodo mayor a los 3 años.

De tal forma que este pobre inocente, victima de las circunstancias y el medio donde creció, solamente estará retenido un máximo de 36 meses, y a los 17 años, podrá reintegrarse como un ser regenerado y productivo a la sociedad.


Si bien, hay instituciones que se están destinadas a cuidar los “derechos Humanos”, son las primeras que evitan que la ley sea cumplida.

Los mexicanos estamos viviendo situaciones complicadas de violencia y guerra civil en el norte, y estamos hambrientos de que el gobierno reaccione y tome cartas en el asunto y se deje de estupideces; ¿No seria bueno que comenzaran a modificar la leyes, de forma que los delincuentes sean realmente castigados por las faltas que cometen?

No soy el único en estar convencido de que la ley debe de estar a la altura de las problemáticas reales del país, y no al mundo de “calderolandia” donde vivimos.

¿A que quiero llegar con todo esto?

Las sanciones o castigos que la ley debe de impartir, tienen que ser de acuerdo a la falta cometida, sin importar la edad del infractor.

La libertad, los derechos civiles, y los derechos humanos, son un privilegio, el cual se debe de perder al cometer algún delito encontrará de la sociedad que los proporciona.


En México, esta mas que demostrado que las cárceles, no son centros de readaptación social, sino que son centros de reclutamiento para las organizaciones criminales.

Reto a cualquier ciudadano conciente, honorable, honesto, trabajador y observador de la ley, a tratar de defender las acciones y consecuencias de los delincuentes.

Lo único que defiendo desde mi trinchera es el derecho de vivir de una manera honesta y segura, y donde los delincuentes estén donde deben de estar, en la cárcel, cumpliendo penas de acuerdo a sus delitos, y sobre todo, trabajando (de 6 am a 10 pm) para su manutención dentro del sistema penitenciario.

No dejemos que este tipo de sucesos pasen por alto, ya que la historia se repite una y otra ves, y no solamente en México, sino en el mundo, no olvidemos el año de 1993, cuando dos niños de 10 años mataron a Jamie Bulger un bebe de 2 años, en Londres.

El crimen de un nene de 2 años que conmovió a Gran Bretaña

Asesino del niño británico, Jamie Bulger, nuevamente arrestado

La Ley en México

Como es de muchos conocido, hace algunos días detuvieron a un niño de 14 años, que desde los 12, fungía como “sicario” de algunos miembros del narco.

A cualquiera nos impacta el tipo de suceso y atrocidades que cometió, y el que sus hermanas, una de 19 y otra de 12, participasen activamente de los mismos y de otros delitos más.



No narrare el tipo de crímenes, ni la forma, ni mucho menos la saña con la que realizo su “trabajo”, por el cual cobraba entre $2,000 y $3,000 Us.

Lo que verdaderamente hiere, es la forma en que nuestras estúpidas leyes resolverán el problema.

Resulta que al haber sido detenido en el Estado de Morelos, queda establecido por ley, que ningún menor de 16 años, podrá estar en “detención”, “correccional” o “cárcel”, como le quieran llamar, un periodo mayor a los 3 años.

De tal forma que este pobre inocente, victima de las circunstancias y el medio donde creció, solamente estará retenido un máximo de 36 meses, y a los 17 años, podrá reintegrarse como un ser regenerado y productivo a la sociedad.


Si bien, hay instituciones que se están destinadas a cuidar los “derechos Humanos”, son las primeras que evitan que la ley sea cumplida.

Los mexicanos estamos viviendo situaciones complicadas de violencia y guerra civil en el norte, y estamos hambrientos de que el gobierno reaccione y tome cartas en el asunto y se deje de estupideces; ¿No seria bueno que comenzaran a modificar la leyes, de forma que los delincuentes sean realmente castigados por las faltas que cometen?

No soy el único en estar convencido de que la ley debe de estar a la altura de las problemáticas reales del país, y no al mundo de “calderolandia” donde vivimos.

¿A que quiero llegar con todo esto?

Las sanciones o castigos que la ley debe de impartir, tienen que ser de acuerdo a la falta cometida, sin importar la edad del infractor.

La libertad, los derechos civiles, y los derechos humanos, son un privilegio, el cual se debe de perder al cometer algún delito encontrará de la sociedad que los proporciona.


En México, esta mas que demostrado que las cárceles, no son centros de readaptación social, sino que son centros de reclutamiento para las organizaciones criminales.

Reto a cualquier ciudadano conciente, honorable, honesto, trabajador y observador de la ley, a tratar de defender las acciones y consecuencias de los delincuentes.

Lo único que defiendo desde mi trinchera es el derecho de vivir de una manera honesta y segura, y donde los delincuentes estén donde deben de estar, en la cárcel, cumpliendo penas de acuerdo a sus delitos, y sobre todo, trabajando (de 6 am a 10 pm) para su manutención dentro del sistema penitenciario.

No dejemos que este tipo de sucesos pasen por alto, ya que la historia se repite una y otra ves, y no solamente en México, sino en el mundo, no olvidemos el año de 1993, cuando dos niños de 10 años mataron a Jamie Bulger un bebe de 2 años, en Londres.

El crimen de un nene de 2 años que conmovió a Gran Bretaña

Asesino del niño británico, Jamie Bulger, nuevamente arrestado